¿Alguna vez te habías preguntado qué es la gestión logística de una empresa y para qué sirve? Lo cierto es que puede ser muy influyente sobre la cadena de suministro. Te contamos todo lo que necesitas saber sobre esto.
¿Qué es la gestión logística y qué tipos hay?
Podemos definir como gestión logística a todos los procesos que hay de administración dentro de una empresa. A través de esta, lo que se hace es organizar todas las operaciones que implica el día a día de una compañía, pero también con las de la logística externa, que afectará desde fuera las operaciones cotidianas.
Esto significa que, por ejemplo, a la hora de gestionar la cadena de suministros debes tener en cuenta el stock que hay y la demanda existente. De esta manera, no solamente vas a poder crear las cantidades necesarias, sino que también podrás acomodar todos los productos para organizar mejor el espacio físico para cada creación.
Ahora bien, debes tener en consideración que existen distintos tipos de gestiones. A continuación, todas las más destacadas.
Logística de producción
Es la que ocurre dentro de cualquier planta o empresa que forma parte del proceso de creación de riqueza. Por ejemplo, la logística de una compañía manufacturera suele encargarse de manejar el flujo de dinero, los materiales, las materias primas y los productos finales que se obtienen.
Si se hace bien, se pueden optimizar los costos de producción. Es decir, se podría mantener la calidad de los productos finales, pero a un menor precio. Este dinero puede formar parte de la plusvalía, que podrías utilizar para pagarle mejor a tus trabajadores, invertir en nuevas maquinarias o simplemente quedártelo.
Por eso, es importante que la producción siempre esté monitoreada. De ahí que sea fundamental controlar las unidades de producción, a la vez que será clave mejorar la interacción de todos los departamentos para que la comunicación entre todos los sectores no suponga fallos.
Logística de stock
Aquí entra en relación todo el trabajo que se da con la existencia de los productos terminados. Es decir, se debe monitorear la cantidad exacta de los productos creados para que los cálculos de la producción encajen con las ventas que deberían efectuarse. De esta manera, se garantizan los buenos resultados en la fábrica.
Logística de información
Por supuesto, la información también debe gestionarse. En el día a día de una empresa, siempre habrá un flujo informativo clave. Cualquier error de comunicación puede derivar en problemas corporativos, motivo por el cual siempre es vital que exista una buena retroalimentación entre todas las partes involucradas.
Logística de distribución
También habrá que gestionar la distribución de todas las mercancías que salgan e ingresen de tu compañía. Aquí no solamente se hace referencia a los productos que envías a los clientes finales, sino también a aquellas empresas que se encargan de llevarte el suministro de las materias primas correspondientes.
De ahí a que siempre debas tener controlado todo lo que afecta de una u otra manera a tu negocio. No deberías cometer el error de confiar en la otra parte, no porque vayan a estafarte, sino porque siempre pueden existir problemas de cálculo en el inventario que pueden derivar en conflictos económicos.
Ahora que tienes en cuenta todo esto, debes saber que trabajar con e-Ful te permite dejar en manos de profesionales todos estos temas. Las diferentes empresas de logística pueden aprovechar estos conocimientos para mejorar sus áreas de negocio.
Te invitamos a que apliques estos consejos de la gestión logística para el día a día de tu compañía. ¡Esperamos que esta información te haya sido de gran utilidad!