embalaje para exportación

Embalaje para exportación: Protege tu mercadería

El embalaje cumple un papel fundamental para que un producto de exportación llegue a su destino en buen estado. Cuando es de mala calidad, puede ocasionar el daño o la descomposición de la mercadería. En estos casos es probable que el comprador rechace el envío.

Con el objetivo de evitar esas situaciones y facilitar el proceso de embalaje para exportación, desde e-ful brindamos un servicio de asesoramiento y ejecución integral. Somos una firma de referencia en el sector de la gestión logística y nuestra cartera incluye clientes de España, Perú, Uruguay y Argentina.

¿Quieres conocer cuáles son los pasos y las características del proceso de embalaje de los productos que se destinan a la exportación? Acompáñanos en este recorrido en el que también ofrecemos recomendaciones sobre el tema.

El proceso del embalaje para la exportación

Antes de avanzar, debemos dejar en claro cuáles son las diferencias entre envase, empaque y embalaje. El envase o embalaje primario es el material que está en contacto directo con el producto. A su vez, el empaque o embalaje secundario es un objeto cuya función es agrupar distintos tipos de envases. La última instancia del proceso es el embalaje terciario, también llamado embalaje a secas, que consiste en la creación de tarimas o contenedores para envases y empaques.

Envase o embalaje primario

Al estar en contacto directo con el producto, el envase debe comunicar la fecha de caducidad, los componentes y otros datos fundamentals. Es la carta de presentación ante los ojos de los consumidores.

Los materiales más usados son:

  • Vidrio. Para alimentos, frutas o líquidos.
  • Plástico. También para líquidos como por ejemplo productos lácteos o cosméticos.
  • Metal o aluminio. Ideal para productos de mar en lata, granos o legumbres.

Empaque o embalaje secundario

En esta fase del embalaje para exportación, los productos se agrupan o apilan sin provocar ningún tipo de daño o alteración. El empaque debe ser resistente a los movimientos que se generan en el transporte.

Los materiales más comunes para el embalaje secundario son:

  • Cartón. Principalmente para el transporte de botellas de plástico o latas.
  • Madera. Es ideal para productos pequeños pero pesados como por ejemplo botellas de vino u otros recipientes de vidrio.

Embalaje terciario

Para crear empaques mayores, los materiales más usados también son el cartón y la madera porque facilitan tanto la manipulación como el traslado. Aquí es crucial lograr que las cargas sean compactas y estables. Otro objetivo que debe cumplir el embalaje terciario es el de aprovechar el espacio disponible en los distintos medios de transporte para que no se produzca un incremento de los costos.

Recomendaciones para un correcto embalaje para exportación

Todos los detalles cuentan para que los productos lleguen a destino de la forma correcta. Por lo tanto, resulta fundamental prestar atención a las siguientes cuestiones:

  • Los productos deben estar colocados apropiadamente dentro del contenedor. No tienen que producirse movimientos ni roces con otros artículos.
  • Llenar excesivamente los contenedores para ahorrar no es una buena idea. Los productos podrían dañarse.
  • Las marcas en las cajas deben ser mínimas. Solo deben incluirse señales de advertencia y los símbolos gráficos internacionales de manipulación. Todo debe estar expresado tanto en el idioma del país de origen como en el del país de destino.

Para seleccionar los materiales adecuados con los que conviene trabajar, hay que analizar la compatibilidad de los productos, de manera tal que no se produzcan alteraciones de ningún tipo. También es importante considerar la resistencia del empaque. Por ejemplo, los artículos electrónicos deben ser embalados para soportar golpes y movimientos fuertes.

En e-ful estamos disponibles para atender cualquier consulta y encontrar el mejor proceso para que tus productos tengan el embalaje para exportación más adecuado a sus características.